Los equipos de tratamiento de agua domésticos que se instalan en numerosos edificios y viviendas particulares necesitan de un mantenimiento periódico para garantizar el correcto funcionamiento de los mismos, especialmente tras épocas de bajo consumo o paradas, como pueden ser los meses de septiembre y octubre, tras el periodo vacacional de verano.
Un equipo con un mantenimiento inadecuado puede producir el efecto contrario del deseado, es decir, en lugar de mejorar la calidad del agua, puede provocar desprendimiento de sólidos o contaminaciones microbiológicas como consecuencia de la suciedad acumulada en instalaciones y filtros, que pueden romperse o desprenderse.
Por ello es muy importante conocer la calidad del agua que se suministra a través de dichos equipos para comprobar que su funcionamiento es correcto, o en su caso, detectar posibles averías o necesidades de mantenimiento.
Con este objetivo, desde LABOCHECK te ofrecemos el análisis Check House que, en combinación con el Check Micro, te permite conocer la calidad del agua que estás consumiendo y, por tanto, comprobar que el funcionamiento de tu instalación es el correcto.
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