13 de septiembre de 2012

Cómo evitar la sequedad producida por las aguas duras




¿Sabías que la calidad del agua puede influir en la belleza de tu piel y cabello? Una piel y un cabello saludables, libres de sequedad, son la clave de mantener un aspecto deslumbrante. Gracias a su bajo contenido en sales, las aguas blandas hacen mejorar la apariencia de nuestra piel y cuero cabelludo, a diferencia de las aguas duras, ricas en sales de calcio y magnesio, que pueden resecar la piel.


Un pelo áspero y sin brillo es uno de los indicadores de la dureza del agua con la que nos duchamos. Por su parte, un agua muy dura puede provocar que la piel sea más seca, e incluso producir picores u otros problemas dérmicos.


Aunque éstos son sólo algunos indicios de que el agua corriente de tu hogar es dura, sólo un análisis, como el Check House de LABOCHECK, es capaz determinar con certeza la calidad de tu agua y su contenido exacto de sales y minerales.


Para reducir la dureza del agua, los equipos más habituales son los descalcificadores, que funcionan por intercambio iónico, y que reducen el contenido de cal a cambio de aumentar el contenido de sal en el agua, o los equipos de ósmosis inversa, en los que el agua es filtrada, reduciendo el contenido de cal y de otras sales que contiene. En caso de tener estos equipos instalados, es aconsejable realizar análisis periódicos del agua para ver si el equipo está funcionando correctamente.

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