La dureza se puede medir en diferentes unidades, las más comunes son en mg/l de Carbonato cálcico (CaCO3) o en grados franceses (ºF), cuya relación es 10 mg/l CaCO3 = 1ºF.
No existe un criterio único para clasificar las aguas según su dureza, ya que según las fuentes consultadas puede variar ligeramente la clasificación. La más habitual para clasificar el agua según la dureza del agua, es la siguiente:
- Muy blanda: de 0 a 3 ºF
- Blanda: de 3 a 10 ºF
- Media: de 10 a 15 ºF
- Dura: de 15 a 30 ºF
- Muy Dura: Más de 30ºF
Las aguas duras o muy duras pueden producir incrustaciones en los elementos en contacto con el agua, especialmente cuanto mayor es la temperatura del agua (electrodomésticos, calentadores, circuitos de agua caliente, tuberías, etc.). También provocan que se tenga que utilizar más cantidad de jabón.
Las aguas muy blandas pueden favorecer la corrosión de tuberías y elementos metálicos en contacto con el agua. También son aguas que tienen menor capacidad para neutralizar el pH (por adición de ácidos, bases, etc.).
En España las aguas más duras se encuentran en la zona este de la península, especialmente la Comunidad Valenciana y Murcia, debido a la naturaleza de los suelos, que son calcáreos. Las aguas más blandas están en la zona noroeste, en donde los suelos suelen ser graníticos o silíceos.
Desde Labocheck, ofrecemos distintos tipos de análisis en los que se determina, entre otros parámetros, la dureza, informándonos sobre las características de nuestra agua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario